lunes, 28 de junio de 2010

Recuento del PRD en Jalisco

Tapalpa. Junio 26

Si la historia sobre el origen del PRD en el País viene de lejos; en el caso de Jalisco no nos quedamos atrás, ya que las luchas campesinas en el Estado y las movilizaciones urbanas se remontan hacia los años veinte del siglo pasado, de algún modo mediante la réplica de las luchas gestadas a nivel Nacional.


LUCHAS Y ORGANIZACIONES CAMPESINAS.

Como muestra de las luchas campesinas se puede establecer que en Jalisco se registra la presencia de organizaciones campesinas de corte oficialista, colaboracionistas y de carácter independientes respecto de su relación con el Gobierno en turno. En el primer grupo se ubica a la CNC, CCI, UGOCEM y CAM; en el segundo grupo se identifican a la CCC, UGOCEP, UNORCA y en Jalisco a la UCD; asociándose con el tercer segmento de organizaciones a la CIOAC y a la CNPA.

Así las cosas y bajo éste mosaico de representación campesina, desde la época de Gobierno del General Lázaro Cárdenas del Río, de donde muchas de éstas organizaciones fincan su origen, las luchas campesinas en Jalisco se gestan teniendo como epicentro los núcleos agrarios ejidales; de ahí que resulta lógico el hecho de que sean precisamente en las regiones del Estado donde impera éste tipo de organización agraria donde se desarrolló más éste tipo de luchas, destacándose por ello la región de Autlán de Navarro y sus municipios aledaños como El Grullo, Casimiro Castillo El Limón, Ayutla, Unión de Tula, Cuautitlán de García Barragán, Cihuatlán y principalmente Tomatlán.

En el caso de la región sur con sede en Zapotlán el Grande, se destacan por sus luchas campesinas los municipios de Sayula, Tuxpan y San Gabriel; por el rumbo de La Ciénega se registran antecedentes de luchas campesinas en La Barca, Poncitlán, Jamay, Tuxcueca, Quitúpan y Valle de Juárez; en la zona de Ameca también se registran movimientos importantes de productores agrícolas como el de l municipio de Tala, lugar de donde nace precisamente la UCD, por el empuje de los cañeros; que irradió y empujó a que los campesinos de otros municipios aledaños se movilizaran para pedir precios de garantía a sus productos, como es el caso de Ahualulco de Mercado, Etzatlán, San Juanito de Escobedo, Teuchitlán y San Marcos; a excepción de algunos movimientos en los municipios conurbados de Guadalajara, prácticamente en el resto del estado no se registran éste tipo de luchas.

Aunque con diferentes liderazgos y presencia por regiones las demandas históricas del movimiento campesino en Jalisco se circunscribe a las siguientes: 1). Regularización en la tenencia de la tierra, 2).precios de garantía a sus productos, 3). Subsidio a la producción y a finales de los ochentas 4). Cambio de partido en el Gobierno.

LUCHAS Y ORGANIZACIONES URBANO POPULARES

La vida orgánica del movimiento urbano en la Zona Metropolitana de Guadalajara es por demás relevante para el País, debido a representar y ser la segunda mancha urbana de México. En ésta demarcación se han desarrollado experiencias de lucha, que involucran desde el uso de tácticas guerrilleras a partir de la confrontación estudiantil entre el FER, (mismo que devino en la Liga 23 de Septiembre) y la FEG en la década de los setentas; hasta la existencia de grupos organizados en la pastoral parroquial, en su mayoría jóvenes practicantes de la denominada Teología de la Liberación.

Respecto del primer tema les diré de manera breve que se trató de una guerra sin cuartel entre jóvenes de un barrio de Guadalajara, llamado San Andrés ubicado al oriente de la ciudad contra dirigentes de la FEG, quienes empezaron su enconada pelea por el control de una escuela; ambos grupos con apoyos de gobierno; los primeros encontraron su mecenas en la familia Zuno Arce y los segundo en los García Barragán. En aquéllos tiempos éstas dos familias detentaban mucho poder dada estrecha relación con políticos de primer orden a nivel nacional.

Sobre los movimientos urbanos populares a partir de la interacción de las células de jóvenes nucleados en los Comités Eclesiales de Base, quiénes a su vez tejían relaciones políticas con los líderes naturales de las colonias donde decidían desplegar su trabajo comunitario de capacitación para la adquisición de habilidades de producción y para la difusión del Evangelio; se puede afirmar que en la década de los ochentas es cuándo alcanzaron su máximo esplendor, ya que a finales de la misma se podía advertir su presencia en una treintena de colonias periféricas de la Metrópoli Tapatía.
De las organizaciones más consolidadas podemos citar a la Unión de Colonias Independientes con trabajo en El Cerro del 4, Nueva Santa María, Buenos Aires, Francisco I. Madero, La Micaelita y La Guadalupana, El Tapatío, El Campesino, Loma Linda y La Mezquitera.

Esta organización inicia su trabajo con independencia y autonomía del Gobierno y de los partidos políticos, encontrando sus principales apoyos y asesorías en académicos del ITESO y de la Universidad de Guadalajara; su forma de gobierno al interior fue horizontal a través de consejos, lo que le permitía la toma de decisiones colectivas.

Su principal estrategia que implementó fue la de democratizar a los medios de comunicación, mediante la exposición de denuncias de problemas que se padecían en las colonias y que afectaban a sus habitantes como los cobros excesivos de la CFE, o del SIAPA; así como deficiencias en alumbrado público o en drenajes, tuberías de agua, inseguridad regularización de predios, entre otros tantos problemas.

Dicha estrategia llegó a permear tanto que de inmediato obtenían respuesta de las autoridades municipales.
Otro gran ejemplo de organización urbana de lucha popular es el caso de Intercolonias, cuyos dirigentes canalizaron sus energías y su experiencia organizativa rumbo al norte de la ZMG; en las colonias ubicadas en las inmediaciones de la Barranca de Huentitán.

Esta organización como otras existentes, seguían el mismo patrón organizativo y de operación antas descrito, persiguiendo incluso los mismos objetivos.

NACIMIENTO DEL PRD EN JALISCO

Después del fraude electoral de julio de 1988, una vez agotadas las posibilidades de comprobarlo, el candidato perdedor, el Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, producto de una gran alianza nacional de organizaciones y partidos políticos da izquierda, lanza una convocatoria para la fundación de un nuevo partido en México. En Jalisco es bien recibida dicha propuesta, de tal modo que prácticamente todos los actores y organizaciones sociales, políticas y culturales progresistas se adhirieron a ésta convocatoria.
En el Estado tenían representación todos los partidos nacionales como el PPS, PDM, PARM, PRS y el PMT, del cual se percibe que se encontraba en mejores condiciones organizativas, con más militancia y con más infraestructura, de tal modo que de éste partido el naciente PRD recibió las instalaciones que durante 15 años albergaron la sede estatal de nuestro partido.

Después de haberse constituido formalmente el partido del Sol Azteca en Jalisco, se nombra a su primer presidente estatal, en la persona del Filósofo Manuel Rodríguez Lapuente, sucediéndole Samuel Meléndres Luevano, quien a su vez es sustituido por Gilberto Parra Rodriguez, después Claudio Palacios Rivera, posteriormente Celia Fausto Lisaola (con interinato de un año por Antonio Magallanes Rodríguez), le sucede Samuel Romero Valle (con interinato por un año de Gabino Cortés Berúmen); siguiendo en el cargo Raúl Vargas López (con interinato actual de Antonio Magallanes Rodriguez).

Desde su nacimiento el PRD en Jalisco ha logrado mantener por lo menos dos legisladores en el Congreso del Estado, asimismo ha logrado gobernar en cada trienio de 5 a 17 municipios en el Estado, lo que conlleva a tener la oportunidad de aplicar la plataforma de gobierno de nuestro instituto político generando buenos actos de gobierno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario